Venom es una de las películas más
esperadas del 2018. Desde que la brevedad con la cual apareció el personaje en
la cinta del 2007, Spider-Man 3,
decepcionó a los fanáticos, muchos han estado implorando a que el personaje
tenga el protagonismo que realmente se merece en el cine. Después de todo, ya
se han estrenado seis películas de Spider-Man
y sólo aparece en una, ¡por alrededor de quince minutos! Bueno, el villano por
fin tiene toda una película para él mismo. ¿Es eso suficiente para satisfacer a
los fans?
La cinta toma lugar en San
Francisco, donde el reportero, Eddie Brock, sospecha que una gran corporación
científica está haciendo unos experimentos macabros. Con la ayuda de una de las
empleadas de la compañía, Brock logra entrar y una extraña sustancia llamada
“simbionte” entra en él. Lo sucedido causa extrañas ocurrencias dentro de su
cuerpo, cambiándolo para siempre. Si eso no fuera suficiente, también tendrá
que evadir los ataques de la empresa…
Venom
es otra entrega dentro de una larga lista de películas que tratan sobre los
orígenes de un superhéroe. Sólo que en esta ocasión es un supervillano. Honestamente,
la historia no es nada espectacular. Hace lo necesario y logra poner en marcha
a este personaje, pero fuera de eso no hay mucho más. Existen otras películas
de este tipo que han hecho un mejor trabajo. Hay un punto en la trama que trata
sobre el personaje de Eddie Brock y su ex novia, pero realmente no llega a nada
sustancioso y no le da el elemento humano que hace que el público pueda tener
una mayor conexión emocional con estas películas y con estos personajes. La
trilogía original de Sam Raimi hizo un trabajo mucho mejor en este sentido.
En realidad, el
gancho de la película es el personaje de Venom. Cabe mencionar que su diseño sí
está bien logrado. La forma en la que se mueve, el rostro, los dientes, es una
criatura, por falta de una mejor palabra, cool.
Sin embargo, lamentablemente, es este mismo personaje el que pronuncia algunos
de los más absurdos y pobres diálogos de la película. Adicionalmente, la
motivación que exhibe el personaje alrededor del final de la cinta no tiene
mucho sentido.
Entonces, la
historia no es nada especial y el personaje gancho tiene bastantes debilidades.
¿Qué hay de la acción? Bueno, las escenas de acción en su mayoría están bien y
sí entretienen. Pero por otro lado, en muchos instantes simplemente se ven
demasiado absurdas y caricaturescas. Un ejemplo primordial sobre por qué los
estudios de cine deben de dejar de abusar el uso de efectos computarizados.
Honestamente, uno de los mejores
aspectos de la cinta es el personaje de Eddie Brock. La interpretación del
personaje es carismática, bien actuada, y las escenas en las que el personaje
empieza a sufrir a base del simbionte que tiene dentro de su cuerpo son algunas
de las mejores en toda la película. No es lo suficiente como para cargar la
película a niveles más altos de calidad, pero sí es un aspecto que fue logrado
adecuadamente.
A pesar de ser una película lo
suficientemente entretenida para ameritar una velada, los fanáticos de las
historietas se merecían una mejor introducción cinematográfica para este
personaje. No es una cinta ni muy buena ni muy mala. Simplemente los aspectos
esenciales, como la historia, las escenas de acción e inclusive el mismo Venom
están realizados de una forma mediocre. Claro, la cinta tiene algunos aspectos
que están por encima de lo mediocre, pero son muy pocos.
Mi Calificación: 2.5 de 5 Estrellas